domingo, 13 de noviembre de 2011

Y ya van a ser tres semanas

Hoy voy a alejarme un poco de la línea que he seguido durante estas últimas semanas...voy a abandonar un ratito mis relatos y voy a ponerme en plan confeso con vosotros, amigos míos. ¿Por qué?, gritaréis algunos con resignación, pues porque mañana hace tres semanas que me fui de España para trabajar como aupair en Inglaterra.
La experiencia me está pareciendo enriquecedora. No sólo estoy conociendo una nueva cultura desde dentro, sino que estoy conociendo personas maravillosas sin que la barrera del idioma sea una tara para entablar una relación. Además, estoy creciendo como persona al tener bajo mi cuidado a dos niños que, aunque no son míos, los trato como si lo fueran...desde luego, me estoy convirtiendo en una auténtica madraza xD
Esta entrada será breve, porque tampoco es cuestión de aburriros con mis locuras, pero quiero que sepáis que la decisión de venir como aupair fue la mejor decisión que he tomado en mi vida. Me ha permitido distanciarme en cierto modo de una vida que me estaba ahogando y darme cuenta de que hay cosas que no quiero perder nunca.  Así que voy a aconsejar a todos los lectores de este blog que, si alguna vez tienen la oportunidad, no lo duden nunca y se embarquen en una aventura semejante a la mía...ya sea como aupair o con una beca erasmus o para trabajar por su cuenta. Hacedlo y no os arrepentiréis nunca, porque estaréis ganando madurez, estaréis aprendiendo a convivir con otras culturas diferentes, conseguiréis adaptar nuevas costumbres a las ya conocidas, probaréis nuevas comidas.... Hay que hacerlo, alejarse de esa vida que en ocasiones amenaza con ahogarnos en el lodo, para tomar perspectiva y poder regresar a esa vida totalmente purificada, con las ideas más claras y una filosofía de vida más estable.
Un saludo a todos desde estas lejanas tierras y espero que el post no os haya aburrido demasiado :P

2 comentarios:

  1. Lo bueno (o lo malo) de irse mucho tiempo de un país diferente, es que cuando vuelves te das cuenta de que todo lo demás es igual y eres tú el que ha cambiado, y dejas amistades irrecuperables, o sólo recuperables en la intensidad de un par de días de viaje. A mí me quedan unos tres años más en Alemania, con idas y venidas de visita a lo que se supone que es casa, y empiezo a pensar que mi casa va a estar donde esté yo.
    Lo de la estabilidad es cierto, aunque en cierta medida te vuelves un extranjero doble, porque te quedas con cosas de allí y de allá, y al final eres de ninguna parte.

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  2. Estoy segura de que este tipo de experiencias son algo increíble para madurar y aprender otras maneras de ver la vida, así que me alegro muchísimo de ese balance tan positivo que haces de tu vida en Inglaterra y deseo de todo corazón que siga siendo algo genial.
    ¡Un beso!

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